Después de la pandemia de la Covid-19 la educación se viene transformando y adaptando a paso lento a la era digital para cumplir no solo con las necesidades y expectativas de enseñanza que requieren las nuevas generaciones, sino también para poder promover herramientas que apoyen en los procesos tanto a profesores como directivos de instituciones.

Frente a esta necesidad y la amplia gama de soluciones que hay dentro de este sector, es que algunas instituciones educativas alrededor del mundo empiezan a hablar sobre la necesidad de integrar una SuperApp, es decir, una aplicación “todo en uno” que puede adaptar varias funcionalidades en una misma aplicación como pagar algún producto, tener un chat, un carnet digital o, cualquier otra cosa que el usuario pueda llegar a imaginar.

En Colombia, esto ya lo empiezan a realizar cuatro jóvenes empresarios: Alan Sepúlveda, Adalin Sepúlveda, Sebastián Bayer y Guille López, quienes crearon Scrinio, compañía desarrolladora de software que se centra en el diseño y desarrollo de SuperApps para instituciones educativas teniendo como base tecnológica agentes autónomos de Inteligencia Artificial, Cloud y framework con los que pueden desarrollar un sinfín de funcionalidades bajo una misma aplicación, la cual, va a tener el nombre de la universidad.

Alan Sepúlveda explica que su primer caso de éxito sucedió con el Sena al desarrollar Sena APP, una plataforma digital cuyo objetivo principal era gestionar la comunidad educativa y generar un puente de conexión entre estudiantes, docentes y colaboradores de la institución.

Esta herramienta, sin embargo, es mucho más que una red social universitaria en la que los usuarios pueden subir imágenes, comentar o hacer historias, ya que la misma, tiene chats con IA que le permite a los estudiantes separar turnos con diferentes tutores, acceder a su carné digital, utilizar una herramienta de currículums y hasta una tienda de emprendedores, además de una billetera digital que tiene alianza con Bancolombia y Davivienda, entre muchas otras cosas.

“A la fecha esta aplicación ya consiguió más de 380 mil descargas y cerca de 50.000 usuarios recurrentes al mes, un hecho destacado y que demuestra el gran potencial de esta herramienta digital que le facilita a los estudiantes estar en sintonía con lo que ocurre en su institución y, poder conectarse con las otras personas”, destacó el cofundador de Scrinio.

Asimismo, esta herramienta es una excelente solución para la parte administrativa y directivos de la universidad, pues les genera beneficios como tener la posibilidad de realizar encuestas, obtener datos en tiempo real sobre el estado en el que se encuentran cada uno de los estudiantes; enviarles mensajes a toda la comunidad con un solo clic o, a los profesores el poder hacer un grupo para conversar con todos los alumnos.

Cabe señalar que para 2027 más del 50% de la población mundial serán usuarios activos diarios de múltiples SuperApps, según lo prevé la consultora Gartner, que indica que este tipo de ‘apps’ se expandirán para admitir ‘chatbots’, tecnologías de Internet de las cosas (IoT) y experiencias inmersivas como el metaverso.

Incluso, tras los exitosos casos orientales de SuperApps como la china WeChat y Paytm en India; en Europa y Estados Unidos varias reconocidas empresas empiezan a trazar su carrera por el desarrollo de este tipo de herramientas. Un caso reciente de ello, fue el empresario Elon Musk quien afirmó que con el cambio de marca de Twitter a X busca desarrollar una aplicación que le permita a los usuarios chatear, realizar llamadas, pedir un taxi, pagar una multa, concertar una cita médica, pedir comida a domicilio, jugar ‘online’, enviar dinero o abonar facturas del agua o el gas.

En ese sentido, si ya gigantes tecnológicos como X u otros como Meta, Amazon, Microsoft, Venmo, le apuntan a este tipo de herramientas, en el sector educativo podrá ser toda una revolución opina Sepúlveda, puesto que no solo buscarán facilitar y satisfacer una necesidad básica de los usuarios o del mercado, sino que su principal objetivo es mejorar los procesos educativos dentro de las instituciones y generar el desarrollo de comunidades que permitan un cambio de paradigma social.

Un estudio de Simform asegura que mientras que los ‘millennials’ suelen tener instaladas más de 65 ‘apps’, los usuarios entre 30 y 40 años están en un promedio de 40 aplicaciones, mientras que los mayores de 40 llegan a cerca de 20, lo que demuestra que esto es una tendencia cada vez más fuerte a nivel mundial y que cada vez va a impactar a más industrias.

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