Los líderes de mercadeo se enfrentan a una época en la que la cantidad de opciones que tienen para hacer su trabajo es enorme. En la actualidad, la tecnología es un factor imprescindible para el desarrollo y crecimiento de estrategias de comunicación comercial y sus posibilidades se enmarcan en los conceptos martech (marketing technology) y adtech (advertising technology).
Tanto revuelo no es para menos. La tecnología tiene efectos en las operaciones comerciales, sin importar el tamaño de una empresa. Proporciona beneficios tangibles e intangibles que pueden ayudar a ganar dinero y a producir los resultados que los clientes demandan. La infraestructura tecnológica afecta la cultura, la eficiencia y las relaciones de una empresa. Por eso, los días de la simple compra de medios se han ido. Ahora es necesario lidiar con términos como digital marketing, SEO (search engine optimization), SEM (search engine marketing), redes sociales y mucho más.
Estamos en un punto en el que el espacio del mercadeo y de la publicidad se redefine constantemente mediante nuevas ideas, conceptos, tendencias, estrategias y mejores prácticas que, a veces, incluso superan la capacidad de captar los cambios. Y si bien las 4P (product, place, price, promotion) siguen siendo relevantes, no se puede hacer mucho al respecto sin el conocimiento que permite diseñar el producto correcto, o la información que ayuda a identificar el lugar correcto, el precio correcto y la forma correcta de promover, que es básicamente la justificación para usar la tecnología.