El rock es mucho más que un género musical; es una cultura vibrante y poderosa que ha sido la musa tanto para las marcas como para la sociedad.
Desde su surgimiento en las décadas de 1950 y 1960, el rock ha sido una fuente inagotable de inspiración para diversas industrias, incluida la publicidad, mercadeo y comunicaciones. La energía, la rebeldía y la pasión asociadas con el rock han llevado a muchas marcas a buscar colaboraciones estratégicas con bandas y artistas de renombre para transmitir mensajes impactantes y conectar con audiencias diversas.
El marketing espectacular de Kiss:
Cuando hablamos de rock y marketing, es imposible no mencionar a la banda Kiss. Además de su música, se ha destacado por su enfoque único y espectacular en el marketing, convirtiéndose en una marca icónica en sí misma. Su estrategia de marketing se basa en la creación de una identidad visual fuerte y distintiva, que incluye maquillaje facial, trajes extravagantes y una estética teatral. Esta imagen ha sido clave para generar un reconocimiento instantáneo y un sentido de pertenencia entre los fanáticos. Como banda también han creado experiencias inmersivas para sus seguidores, como cruceros temáticos y atracciones en parques, generando una mayor lealtad y conexión emocional con los fanáticos. Han capitalizado su imagen y logotipo distintivos a través del licenciamiento de productos y la protección de sus derechos de autor, lo que les ha permitido mantener su exclusividad y generar ingresos adicionales.
La fuerza de la autenticidad:
Una de las razones por las que las colaboraciones entre marcas y artistas de rock son exitosas es la autenticidad que transmiten. El rock es un género que valora la individualidad y la expresión personal, y esto se refleja en las marcas que se asocian con artistas de renombre. Por ejemplo, la marca de ropa Levi's ha colaborado con músicos de rock icónicos como The Rolling Stones y Guns N' Roses, por otro lado, Metallica –icónica banda de heavy metal– ha colaborado con marcas como Obey, Bravado y Vans para lanzar colecciones de ropa inspiradas en su repertorio músical.
Ampliando el alcance de las campañas en conciertos y festivales:
La colaboración con bandas de rock ha brindado a las marcas la oportunidad de alcanzar audiencias difíciles de captar de otra manera. Los seguidores leales y apasionados de muchas bandas de rock están dispuestos a respaldar a las marcas que apoyan a sus artistas favoritos. Marcas como Coca-Cola y Jägermeister lideran en patrocinios de festivales a nivel global. Además, los conciertos adquirieron una mayor relevancia en el año 2022, y el Movistar Arena se estableció como el escenario con más conciertos de rock, el estadio con capacidad de 14.000 personas recibió a bandas como Kiss, Helloween, Hammerfall, Gorillaz, Gojira, Andrés Calamaro, Cuarteto de Nos, Zoé, Fito Páez, Juanes y formó parte del Knotfest Colombia.
Transmitiendo emociones y mensajes poderosos:
El rock es conocido por su capacidad para evocar emociones fuertes y transmitir mensajes impactantes. Las marcas han aprovechado esta cualidad al colaborar con artistas de rock para crear campañas publicitarias memorables. Un ejemplo claro es la marca automotriz Jeep, la cual se asoció con el músico Bruce Springsteen en un anuncio que buscaba transmitir un mensaje de unidad y esperanza durante tiempos difíciles. En 2009, Volkswagen lanzó una campaña con el clásico tema de Queen, "Bohemian Rhapsody". El comercial mostraba a diferentes personas en sus automóviles cantando la canción, generando una conexión emocional con la música y la experiencia de conducir un Volkswagen.
A través de la autenticidad, la ampliación del alcance de las campañas, la transmisión de emociones y la construcción de conexiones emocionales duraderas. El rock es mucho más que música; es una cultura que ha influido en muchas áreas, y seguirá siendo parte de la inspiración de las industrias.
