Gato Dumas, Fundación Tierra de Paz y Open Society hacen una alianza para reivindicar la hoja de coca en Colombia, promoviendo su uso en la gastronomía nacional mediante programas de formación y becas para líderes de regiones cocaleras. La iniciativa busca cambiar la percepción histórica de la planta estigmatizada, enseñando preparaciones como condimentos, almojabanas y coberturas de chocolate con harina de coca. Los líderes compartirán lo aprendido con sus comunidades, promoviendo un trabajo colectivo en torno a este insumo natural.

Líderes provenientes de diferentes departamentos con cultivos de coca en Colombia se capacitaron en Bogotá. El programa de formación fue desarrollado por el Instituto de Gastronomía, en colaboración con la Fundación Tierra de Paz, encargada de la selección de los candidatos de esos territorios. Durante todo el proceso, ambas organizaciones cuentan con el apoyo de Open Society Foundations.

Bajo el liderazgo de Mónica Ríos, directora del Laboratorio de Innovación LAB Gato Dumas, esta iniciativa forma parte del proyecto "Coca no Cocaína", premiado con el Social Commitment Award en el Bocuse D’Or. Las comunidades ya trabajan con la hoja de coca, aprovechando sus beneficios para la salud y buscando oportunidades económicas legítimas, como la preparación de té. El programa busca mejorar y diversificar las técnicas y productos, permitiendo que estas comunidades los comercialicen a través de emprendimientos.

Los líderes ya vienen haciendo un trabajo desde sus regiones y con el conocimiento que adquieren en Gato Dumas podrán perfeccionar sus iniciativas y consolidar unas nuevas. La educación y la gastronomía son dos grandes herramientas de transformación que unidas brindan oportunidad de desarrollo para el ser humano y su entorno

Puntualiza Mónica Ríos.

Este programa de US$60.000 se enfoca en tres áreas: experiencia, donde los líderes visitan mercados locales, conocen proveedores y aprenden de expertos en productos a base de coca; entrenamiento, que incluye capacitaciones en técnicas gastronómicas y creativas para usar la harina de coca en platos dulces y salados; y conciencia, donde se imparten clases de liderazgo, emprendimiento y storytelling para generar conciencia en las comunidades sobre nuevos usos de la planta y su impacto en la historia de Colombia.

Carolina Parra, fundadora y presidente del Instituto Gato Dumas, señala que este proyecto es una oportunidad para construir nuevos caminos de desarrollo desde la cocina y la riqueza natural de Colombia. “Las comunidades conocen de cerca la planta y su entorno, y los líderes lo que necesitan es tener las capacidades para hacer un cambio desde adentro. Nosotros como instituto de educación gastronómica podemos brindarles las herramientas necesarias para que puedan desarrollarse de manera correcta y ellos se encargarán de accionar este conocimiento dentro de sus comunidades. Es la oportunidad de hacer posible un futuro esperanzador para todos”.

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