
En 2024, los artistas colombianos generaron más de 400 mil millones de pesos solo en Spotify. En un país donde hace poco más de una década la música vivía entre CDs y emisoras, el streaming no solo cambió el consumo: transformó la economía, la visibilidad y la forma de vivir del arte sonoro local.
Hasta el 2012, año en el que la primera plataforma de streaming musical aterrizó en el país, los colombianos accedían a CDs, canciones descargables que debían grabar en sus celulares o se conformaban con la programación radial para escuchar música. Hoy, el panorama es otro: el streaming representa el 78,6 % de los ingresos de la música grabada en Colombia , de acuerdo con la Federación Internacional de la Industria Fonográfica (IFPI).
Además de convertirse en un espacio masivo, seguro y rápido para el consumo de música, plataformas como Spotify son la puerta de entrada para que millones de artistas encuentren visibilidad, se conecten con audiencias globales y generen ingresos sostenibles sin depender de modelos tradicionales .
Así lo demuestran los datos revelados por Spotify en su más reciente informe Loud & Clear, que expone el funcionamiento de su economía de regalías. Según el documento, los artistas colombianos superaron los 400 mil millones de pesos en ingresos dentro de la plataforma en 2024 , y el número de creadores que ganan más de 50 millones de pesos al año ha crecido 11 veces desde 2019 .
El consumo también ha cambiado profundamente. Cada día se escuchan más de 9 millones de horas de música colombiana en Spotify , y los colombianos están escuchando más que nunca a sus propios artistas. Hoy, más del 60% de las canciones del Top 50 diario en Colombia son de artistas nacionales, el doble que en 2020. Este dato refleja un cambio cultural: los sonidos locales ya no solo son reconocidos internacionalmente, también son protagonistas del gusto doméstico.
Esa visibilidad global se traduce en cifras contundentes: más de 704 millones de listas de reproducción en el mundo incluyen música colombiana , y los artistas nacionales han sido descubiertos por primera vez más de 2.200 millones de veces por oyentes internacionales. Desde el algoritmo hasta los oídos del consumidor, el talento colombiano no solo suena: se posiciona, se comparte y se celebra .
Ahora bien, ¿cómo se transforma un “play” en ingresos? Spotify monetiza principalmente a través de dos fuentes: suscripciones Premium y anuncios en la versión gratuita. Aproximadamente dos tercios de esos ingresos se pagan a los titulares de derechos (sellos, distribuidores, editores o sociedades colectivas), quienes reparten el dinero según los contratos establecidos. El porcentaje final que recibe un artista depende de su vínculo con esas entidades.
Aunque el sistema aún es complejo y sigue generando debate, Loud & Clear busca hacer más transparente el modelo. Y si bien no resuelve todas las tensiones de la industria, sus cifras demuestran que el streaming sí está funcionando como una vía de sostenibilidad para millones de músicos.