martes, diciembre 10, 2024
Comunicación

La pizarra de Pizarro: La W, acompañarle, al interior y ciento un canciones

Es posible que porque la W pertenezca a una cadena española, se les haya pegado la maña del leísmo, ya no solo en sus transmisiones diarias sino ahora en sus medios escritos. En España es muy común cometer este error: cambian el lo, por le.

Y es que, no es una manera más elegante de decir las cosas, sino que son cosas bien diferentes. Básicamente es confundir los complementos directos con los indirectos. Una manera simplista e incompleta es pensar que los primeros (la, las , lo, los) se refieren a las personas y los segundos (le, les) a las cosas, pero sigue siendo una manera de empezar a entender el asunto.

Veámoslo con el ejemplo del aviso de La W. Dice: …acompañarLE en su viaje… cuando se refiere a usted. Ese usted debería ser lo, porque es el principal participante de la acción. En un caso opuesto, si fuera algo como …(compré una manzana) Voy a mostrarLE lo que compré… ese le se refiere a la manzana (indirecto) que será mostrada al directo (él o usted).

Ahora bien, lo puede referirse también a una cosa: compré un carro, voy a mostrarLO. Para facilitarlo, sigamos con el carro: voy a comprarLO (el carro), no es lo mismo que: (un carro que) voy a comprarLE. En el primer caso, el carro es el protagonista. En el segundo caso, el carro es el indirecto, que va a llegar al directo. Como yo tiendo a enredar las cosas más que a explicarlas, les recomiendo buscar ejemplos de leísmo. Se los recomiendo.

Y para seguir dándole palo a La W, dos errores dolorosamente frecuentes: el primero, el uso absurdo de “al interior” cada vez que deben decir “en”. Y el segundo, promocionar su programa de música del fin de semana como “las ciento un canciones…” en lugar de “las ciento una canciones” ya que por ser femeninas, deben concordar en la oración.

Éxito, las tildes

la pizarra de pizarroA mí me parece divertido (aunque algo confuso) el manejo del nombre de los almacenes Éxito: éx!7o. Lo que no es divertido y aún más confuso, es su manejo de las tildes; en estos dos avisos se enredan bastante con ellas y agregan tildes donde no deben existir. Sobra la tilde en “dónde” y sobra también en “comprálos”.

También le puede interesar: El arte perdido de redactar anuncios

De por qué sobran estas tildes hemos dado suficientes explicaciones a lo largo de los años de esta columna. De lo que no hemos hablado y creo que vale la pena tratar es de “app”. Estrictamente hablando, “app” no está reconocida todavía para reemplazar aplicación. En España utilizan apli pero es muy poco frecuente en Latinoamérica. Me uno al consejo de Fundéu en utilizar, si es necesario (muy demorado escribir aplicación o muy cursi escribir apli), app en cursiva.

Dentix

la pizarra de pizarroDos errorcitos en el aviso de Dentix. La mayúscula en “Abril” no me molesta tanto como la tilde en ”ti”, pero cumplo notando los dos. Lo he dicho antes y lo repito ahora: espero de un profesional que predica la perfección, un manejo del idioma a la altura de sus estándares. Un manejo descuidado del idioma me hace desconfiar de su calidad como profesional en su área específica.

Por Carlos Pizarro