Tras el objetivo de potencializar proyectos y hacer que las marcas crezcan, es posible encontrarse con diversas herramientas, como lo son el marketing de datos, digital o predictivo entre muchísimas otras; la realidad es que los caminos son infinitos.

Sin embargo, es clave poder identificar el contexto especifico de la marca en su mercado para formular estrategias efectivas en la necesidad de cada caso. De acuerdo con el DANE, en el 2021 Colombia tuvo un crecimiento del 10.6 % en su PIB (Producto Interno Bruto), esto quiere decir que estaríamos alcanzando niveles de actividad económica similares a los que se tenían antes de la pandemia del coronavirus.

Efectivamente, son grandes noticias, pues la producción de vienes y servicios está retomando su ritmo anterior a la pandemia. Lo que hace de este momento perfecto para construir estrategias que permitan aprovechar al máximo las oportunidades que surgen, especialmente, para adelantarse a los competidores y asegurar el acceso a ellas.

El primer paso es identificar sus competidores directos para hacer un análisis de lo que ofrecen y cómo lo ofrecen, es decir, sus capacidades. A este proceso se le llama Benchmarking, término que se ha venido usando desde los años 90 y que ha demostrado ser efectivo para aproximarse prácticas y estrategias que han sido útiles para otros negocios que compiten con uno por un puesto en el mercado.

No obstante, tal como lo señala la revista académica Harvard Business Review, si bien es un proceso que brinda herramientas efectivas para proyectos similares al propio, se queda corta, en la medida en que permite alcanzar el desempeño de los competidores, pero probablemente no permita superarlos.

Además, los análisis de competencias pueden arrojan cifras sobre el desempeño, pero muchas veces no tienen en cuenta la relevancia sociocultural de las marcas, un factor determinante en el lugar que ocupan en el mercado.

Frente a esto, se sugiere estudiar a la competencia para ir más allá. El ejercicio es pensar como el otro para que una vez se identifiquen acciones, ideas y estrategias, pasar a ampliar el panorama e incluso salirse de la industria. Esto facilita el identificar herramientas y estrategias de crecimiento que han funcionado en otro tipo de negocios y que pueden, al ser intervenidas, ser muy efectivas para el propio. Además, tal como lo señala un artículo en la revista Strategy+Business, la cultura organizacional no puede ser replicada, y es en sí misma uno de los factores clave en el desempeño de un negocio, por esto se invita a identificar las propias fortalezas y usarlas para innovar en modelos ya existentes.

De este modo, si bien es fundamental anticiparse a la competencia, es importante hacerlo de manera estratégica. Por eso, VMLY&R Commerce ofrece en su portafolio de soluciones un workshop enfocado exclusivamente en este tipo de estrategia; su nombre es Hacking the growth, donde más que realizar un estudio de la competencia, se identifican los posibles movimientos que pueda tener para así ajustar de manera efectiva la estrategia de crecimiento. Es cuando se está un paso adelante de la competencia que se logra fortalecer la propuesta única de valor.

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