viernes, julio 26, 2024
Vivianne

En el dinámico escenario, diversas fuerzas se entrelazan y configuran el rumbo de la región.

Las macrofuerzas presentadas en el estudio anual "Look to the Future Volumen 2023" de Kantar división Insights, nos ofrecen una visión fascinante de las tendencias más importantes que están moldeando el panorama latinoamericano, y hay que destacar que no sólo proveen información interesante sobre lo que hoy vive el consumidor, sino que también permiten tener bases estratégicas para que las marcas puedan responder con productos y servicios oportunos, relevantes y distintivos.

Frente a lo que se entendió en 2022 se observa en esta entrega de “Look to the future”, una evolución de las tendencias más conectada con lo que podríamos llamar “supervivencia”, pues toman más fuerza los temas que relacionados con la salud y la economía personal y del hogar. Por ejemplo, tenemos un contexto donde la optimización del presupuesto es clave, pues los consumidores se convierten en auténticos "cazadores de descuentos", buscando alternativas que les permitan estirar al máximo sus recursos económicos. Y aquí la premisa es clara: obtener el máximo beneficio al menor costo posible.

No podemos olvidar que otro tema de gran relevancia es la sostenibilidad, y que refleja cómo las personas ya no le dejan toda la responsabilidad al gobierno y a la industria. Por el contrario, crecen tendencia que hablan de un mayor involucramiento en el cuidado sostenible, evidenciado por ejemplo en hogares que adoptan prácticas eco-sustentables, buscando un equilibrio entre el cuidado del planeta y su propio bienestar económico.

Sin embargo, esto no quiere decir que no haya una veeduría sobre el rol de la industria, de hecho, la macrofuerza de curaduría precisamente habla de cómo los consumidores demandan conocer la procedencia, los procesos y los ingredientes de lo que consumen. Ya no es suficiente con hablar sobre lo que hacen las compañías, pues el consumidor exige hechos tangibles y transparencia en los procesos de elaboración y suministro de productos y servicios.

Pero hay que entender que este consumidor en general también busca preservar su estilo de vida; si bien es cierto que existe presiones de índole económico y político que generan incertidumbre sobre el futuro, contrario a algunos años atrás, no hay disposición de sacrificio sino de estrategias que permitan “disfrutar la vida, incluso con menos”.

Por eso vemos tendencias que hablan de cómo se busca un nuevo lujo dándole un valor superior a lo que antes podía ser considerado como básico, y que, a través de la exaltación de su historia y procesos, se empieza a ver con ojos más premium, muchas veces sin tener que pagar más.

También, otra forma de disfrute de la vida al máximo es a través de las experiencias, donde lo riesgoso y diferente toma especial fuerza; tras un COVID de dos largos años las personas están listas para experimentar y salir de su zona de confort, pero también para desconectar de las rutinas constantes del día a día (que modificaron horarios tradicionales de trabajo y la barrera entre oficina y hogar, por la que las personas buscan formas de desconexión).

Ahora bien, cuando hablamos de aquello que empieza a impactar al consumidor en su forma de conectar con el mundo, vemos macrofuerzas como el “empoderamiento”, que habla sobre la búsqueda nuevas habilidades más allá de los esquemas tradicionales. El aprendizaje autodidacta, el coaching personal y el espíritu emprendedor representan vías de crecimiento y desarrollo en un entorno cambiante y exigente.

Y es que precisamente lo que se observa con este estudio es que el mundo cambia no sólo en la forma en que se conectan unos a otros, a través de una digitalización más extrema (que replantea incluso la forma en que se pueden comprar productos y servicios), sino que también evoluciona con estructuras sociales que dan paso a nuevos roles de las personas al interior de la familia, o incluso modifican el mismo concepto de familia (con situaciones como la decisión de no tener hijos), que va más allá de temas de inclusión y diversidad.

Las macrofuerzas en Latinoamérica representan un panorama de oportunidad para que las marcas puedan conectar de manera significativa con los consumidores, entendiendo las realidades cambiantes de la región y lo que para ellos es realmente relevante y cercano.

También le puede interesar: Diversidad e inclusión: el nuevo insight

28
agosto
Evento

Dircom Tracker 2024

La presentación del estudio que analiza el rol del líder de comunicación organizacional en Colombia