Por medio de la Alpi-cápsula, que se ubicó en diferentes rincones de Colombia, Alpina recorrió el país preguntándole a los colombianos cómo sienten esta época.
En una iniciativa participativa, Alpina cerró el año con su campaña navideña titulada "Eso que sientes, es Navidad", la cual se destacó por su enfoque centrado en los colombianos y sus experiencias durante la temporada festiva.
La empresa láctea optó por un acercamiento diferente al crear la Alpi-cápsula, un estudio sobre ruedas que recorrió diversos rincones de Colombia, incluyendo barrios de Bogotá, Medellín y Cali, en la cual su misión fue clara: preguntar a los ciudadanos cómo experimentan y sienten la Navidad, convirtiéndolos en protagonistas directos de su campaña publicitaria.
Más de 800 colombianos participaron al compartir sus testimonios sobre las emociones y tradiciones que asocian con la temporada navideña. Estos testimonios se recopilaron semana a semana en cada ciudad, construyendo así una campaña en tiempo real que reflejara la diversidad de sentimientos y prácticas en todo el país.
La campaña de Alpina buscó resaltar la singularidad de las experiencias navideñas colombianas, evidenciando que, independientemente de la región, los sentimientos más comunes asociados con la Navidad incluyen la felicidad, la nostalgia, la tristeza y la reconciliación.
“Eso que sientes, es Navidad es una invitación a permitirnos sentir diferente, dejar a un lado eso que nos ha dado vueltas en la cabeza todo el año y darnos el espacio de compartir con quienes nos rodean para gozar, saborear y vivir cada sentimiento que nos evoca la Navidad. Venimos de 11 meses de incertidumbre y preocupaciones, para finalmente llegar a un mes donde todo se siente diferente. Por eso salimos a la calle para escuchar desde la voz de los colombianos y para los colombianos las emociones que marcan esta época”, mencionó Andrea Restrepo, gerente de Marca Alpina.
Los testimonios recopilados revelaron tradiciones únicas que caracterizan la diversidad cultural colombiana durante la temporada navideña, desde convertir las cuadras en mesas hasta bailar villancicos, pasando por preguntar por buñuelos o natilla, y adelantar el montaje del árbol de Navidad desde noviembre.
La iniciativa de Alpina no solo busca resaltar sus productos, sino también celebrar los pequeños momentos cotidianos que, en ocasiones, pasan desapercibidos. La empresa mantiene su compromiso con la sostenibilidad y sigue trabajando para nutrir un mundo más sostenible.
